Si su hija posee un dormitorio pequeño y usted no sabe cómo re decorarlo, la mejor opción es esta… ¡muchos colores y muebles grandes! Quizás estas dos cosas le den la sensación de que es más pequeño aún el espacio, pero definitivamente se ve muy bien y resulta muy acogedor y agradable. Es un dormitorio pensado para una niña de 10 años en adelante (aunque obviamente puede ser para una niña más pequeña, sólo que en un dormitorio como este, no tendría espacio para jugar).
Las cuatro paredes se han pintado de diferentes colores cada una, una elección muy arriesgada pero con excelentes resultados.
Lo que más me gusta de este dormitorio es el armario de madera laqueado en fucsia; es de un estilo bien clásico, con unos detalles de terminación bellísimos. En sus puertas tiene vidrio, por lo que se puede ver en su interior la ropa colgada.
Al lado del armario, vemos un bonito espejo de pie blanco. Así su hija podrá verse en él mientras decide qué vestido ponerse.
La cama de hierro pintado de blanco, con un estilo muy clásico, le aporta a la habitación elegencia y sofisticación. Esta cubierta por ropa de cama muy colorida, al igual que los cojines (todos con diferentes colores y estampados).
Por último, otros detalles que le brindan más color aún a este dormitorio de niña son las cortinas (no son traslúcidas, es una tela bien gruesa), la alfombra, la lámpara de la mesa de luz, y las flores que están sobre el marco de la ventana.